viernes, 11 de enero de 2008

Primer cumpleaños de mi beba







Mi tesoro cumplió su primer año, qué felicidad, yo tan feliz como ella, aunque no creo que entienda mucho aún lo que es un cumpleaños, igual lo disfrutó, le enseñamos a soplar la vela pero con la gente frente a ella diciéndole que soplara, como que se asustó y yo la ayudé. Mil años más y bendiciones para mi beba. Algunos de los sobrenombres ultraempalagosos o inventados que le digo a mi consentida: mi tuntin, tesoro, chiquituni.














Nuevo año

Iniciamos un nuevo año, con mucha energía y ganas de hacer mil cosas. Mi beba acaba de cumplir un año y está en esa fase de exploración en la que tienes que supervisarla cada segundo, pero me encanta, ¡Qué belleza! Una como madre aprende con ellos y es una delicia ver cuando empiezan a imitarte, comiquísimo.
Uno de mis propósitos para este nuevo año es empezar en mi nuevo empleo de aquí a junio, ese que disfrute cada día, que tenga un horario normal y cómodo que me permita compartir con mi hija al salir y llevarla a sus actividades, sin guardias, sin ocupar mis fines de semana, sin tener que quedarme más allá de la hora de salida como si uno no tuviera más nada que hacer que trabajar y que me dé un salario fabuloso.
Por otra parte, después del desastre de mi vida amorosa en el 2007, espero que la persona que decida acercárseme este año sea respetuosa (conmigo y con mi hija), sincera, amorosa, apasionada, comunicativa. Basta de los hombres inseguros e inmaduros que no saben lo que quieren, o que cada día quieren una cosa distinta o que empiezan a conquistarte para que cuando te convenzan y decidas aceptarlo te den la espalda para volver con su ex, porque ese proceso de conquista no era más que la manera de pasar el tiempo mientras lograban volver con la ex. Nada de eso, me provoca hacer un cartel que diga: "hombre, tienes que estar claro y quererme genuinamente, además de respetar a mi hija, si no es así, ni te acerques, ni lo intentes, no me hagas perder el tiempo". Sin embargo no puedo negar que cada experiencia significa un aprendizaje y destaco además que de uno de esos breves romances con un hombre de esos que ya describí, nació mi mayor tesoro: mi hija y eso se lo agradezco a él, a la vida, al Universo, a Dios.
FELIZ AÑO 2008