El viernes fui a hacerme un chequeo odontológico, era necesario puesto que tenía más de 1 año sin hacerlo. Mi odontóloga: amiga mía, es muy calmada para hacer ese duro trabajo de verle la boca a los demás, delicada con sus pacientes y con mucha paciencia. Paciencia es la que se necesita conmigo, menos mal que ella ya lo sabe y me lo dice: "bueno, aquí voy, levantas la mano si sientes molestia, es que tu umbral del dolor es bajito"...
Antes de eso, yo cruzaba los dedos para que todo estuviera bien fino y no fuera necesario utilizar el temido taladrito, entonces dijo: "qué broma con tu mordida, tengo que cambiarte la resina de esa muela porque la desgastaste con la mordida, ¿no estás utilizando los aparatos?" Y... ¿qué implica eso de cambiar la resina? Que hay que limpiar la cavidad de cualquier residuo de esa resina vieja para poder poner una nueva. Les explico, esa cavidad no es una caries, al principio lo fue, la trabajaron y dejó de ser caries, peeeero... mi mordida me ha dañado la resina 2 ó 3 veces y me la han tenido que colocar de nuevo esa cantidad de veces, cada vez que retiran la que no sirve se puede ver la cavidad que quedó Y ME DUELE, aunque no sea caries DUELE LA BENDITA CAVIDAD DE MI ÚLTIMA MUELA DEL LADO DERECHO.
Comenzó el trabajo, mi pana odontóloga puso a trabajar el taladrito y a los 3 segundos vino mi primer quejido, ¡au! Pausa, va de nuevo, 2 segundos más y ¡AU! Ella dice: "tranquila, esto es rapidito, ya voy a terminar"... De nuevo... ¡AUU! me hundí tanto en la silla que pensé que la atravesaría y me saldría de ella. Otra vez el cuento de que "es rapidito, me faltan 2 toquecitos y ya". NO PANA, a la 4ta vez le dije que me dolía mucho, MUCHO, y me puso anestesia. ¿Saben qué sucede conmigo? me ponen anestesia, hacen la prueba a ver si duele y como ya está aparentemente dormida mi boca, va de nuevo el taladrito: Y JUSTO ESE PEDACITO, ESA ESQUINITA DE MUELA NO HA AGARRADO ANESTESIA Y CÓMO DUEEEEELEEEE. Así sucedió hace año y medio cuando me trataron por 1ra vez esa fulana cavidad: me anestesiaron 3 VECES y yo sentía el dolor igualito, la boca se me durmió cuando llegué a mi oficina media hora después. Esta vez no fue diferente, es como si esa esquina no fuera parte de la misma boca que se duerme con la anestesia, la esquina sigue despiertita y así tuve que aguantar hasta que terminó, tratando de convencerme a mí misma que no iba a sentir nada. En el último toque le aparté la mano bruscamente porque estuvo heavy. Gracias a Dios había terminado. Es que mi umbral del dolor se quiebra con esa muela, lo admito, ante ese taladrito soy muy, muy cobarde... Que levante la mano quien deteste el taladrito de los odontólogos...¿Puedo levantar las 2?